UVA/UVB, ¿qué diferencias hay?
Cuando compras una crema solar, sabes que protege de los rayos UVB y de los UVA. Pero, ¿sabes realmente qué diferencia hay entre ambos?
¿Sabes que en realidad existen tres tipos de UV? Se clasifican según su longitud de onda, es decir, su penetración en la piel.
– En primer lugar están los UVA, que representan el 95% de los rayos UV. Aunque son menos visibles a corto plazo, no son menos nocivos, ya que atraviesan las nubes y llegan a la dermis de la piel incluso cuando pensamos que no estamos expuestos al sol. Son los que aceleran el envejecimiento cutáneo.
– Por su parte, los UVB representan solo el 5% de los rayos UV, pero actúan a corto plazo. No atraviesan ni las nubes ni los cristales, y son los que permiten que tu piel se broncee. Pero también son la causa de las famosas quemaduras en caso de una exposición prolongada.
– Por último están los UVC, que son menos conocidos porque la capa de ozono los filtra y, por tanto, no llegan a la piel (por ello, los productos de cuidado solar no ofrecen protección contra los UVC).
Como hemos visto, los UVA son los más fuertes, alteran directamente las células de la piel y afectan a su envejecimiento: las arrugas aumentan, se marcan más fácilmente y, en el peor de los casos, son responsables de cáncer de piel. En cuanto a los UVB, son los que dan más o menos color a la piel (bronceado y también quemaduras).
¿Qué significan los índices de protección?
El índice SPF (Sun Protection Factor)
El SPF es una medición del nivel de protección contra los UVB. Las cremas de protección solar están agrupadas en 4 niveles de SPF:
Schulze definió en 1956 el factor de protección solar de la siguiente manera: «Es el cociente entre la dosis eritematógena mínima (DME) en una piel protegida por un producto de protección solar y la dosis eritematógena mínima en la misma piel sin proteger».
SPF = DME piel protegida / DME piel no protegida
De una forma más sencilla, si una persona presenta una quemadura solar tras 5 minutos de exposición sin protección, un SPF de 50 significa que necesitará 4 h. y 15 min. (50×5 = 250 min.) para presentar la misma quemadura solar con esa crema solar. Esto nos indica que una crema solar con un índice de protección idéntico puede proteger durante más o menos tiempo dependiendo del fototipo (tez) de la persona.
El índice PA
Le PA définit la protection UVA selon la législation Asiatique et oblige à donner le niveau de protection UVA. Ce niveau est exprimé en « + », utilisé de 1 à 4 pour exprimer l’intensité.
Plus généralement, selon la législation européenne vous le retrouverez sous ce logo, mais attention, il n’y a aucun niveau de protection indiqué :
¿Qué protección? ¿Para qué tipo de piel?
Como ya hemos mencionado anteriormente, el grado de protección que necesitas depende también del tipo de piel que tengas. No obstante, te recomendamos que elijas siempre la mayor protección, es decir, el índice más alto, sea cual sea tu tipo de piel. Así, tu bronceado será más bonito y duradero, ya que la piel no habrá sufrido ningún traumatismo durante las primeras exposiciones.
Te recomendamos también que te eches la crema después de cada baño y que evites exponerte al sol en las horas más calurosas del día, especialmente si tienes la piel clara.
La rutina ideal
Cada día y durante todo el verano, el tratamiento diario Cell Protector SPF 50+ & PA++++ es ideal para hidratar la piel y protegerla de los UV, incluso en la ciudad (no lo olvides: ¡los UVA atraviesan las nubes!). Este tratamiento de día actúa también como un escudo global contra los radicales libres (estrés, contaminación, etc.).
En caso de que te expongas al sol (un almuerzo en una terraza, un día de playa, un paseo…), ten siempre a mano tu estuche Touch & Protect SPF 50+ & PA++++. Aplicado con un solo gesto con ayuda de la borla, garantiza la máxima protección de la piel y proporciona un toque de frescor al cutis.
Para prolongar el bronceado y ayudar a que tu piel se regenere, es importante hidratarla tras cada exposición al sol. Para ello, puedes utilizar una crema hidratante para el cuerpo o una para después del sol, ambas serán muy beneficiosas.
También te recomendamos que cada semana utilices un exfoliante para eliminar las células muertas de la superficie de la piel y para reavivar el bronceado.